miércoles, 12 de agosto de 2015

Playa de Mogor, Marín. Pontevedra

No es simplemente un merendero o un chiringuito de playa, el nombre engaña. Preciosas las vistas e impresionante el atardecer desde su terraza. Sala correctamente montada. El servicio correcto, sobre todo para un chiringuito, bien de tiempos y de trato. 
Para mi imprescindibles las navajas, buena ración. 
Bien la tortilla, pero los calamares algo más flojillos, un poco pesada su fritura. 
Además probamos la empanada de chocos, típica de la zona, y la croca.
 Bien la carne aunque un poquito pasada de punto, la próxima vez les diré que la hagan vuelta y vuelta. 
Bien de tamaño las raciones, postres caseros bien resueltos, aunque todos muy calóricos, como las filloas rellenas de toffe, la tarta de galletas oreo o la leche frita.

Bien de precio, pagamos unos 20€ por persona con vino y café.

jueves, 6 de agosto de 2015

El de Alberto, A Coruña. Detrás de la Domus

Pequeño bar de entrada, sala con decoración sencilla pero acogedora, con un curioso reservado, que te sorprenderá en cuanto lo veas.

Carta bastante amplia, con una cocina de producto con matices asiáticos y ciertas pinceladas de técnica, pero sin estridencias.
Lo mejor en la primera visita es dejarse aconsejar por Alberto. En nuestro caso fueron una croqueta de foie en caldo de miso, espectacular, un placer para los sentidos. Después llegaron los tomates rellenos caramelizados, un bocado con toques de técnica, y bonita presentación.


 Las croquetas de marisco fueron el siguiente, una explosión de sabor y una textura fantástica. Para terminar el bonito, ya que estábamos en temporada, sobre un risoto de marisco. El bonito en el punto que me gusta, fresquísimo y con su punto de sal, quizás el risotto debería apprtar un poco más de cremosidad, se queda a camino entre un arroz caldoso y un risotto. Lo mejor la sorpresa del falso tomate.


Para finalizar los falsos filipinos, muy, pero que muy interesantes, esp sí, para comer de un único bocado. Y la piña con crema  de arroz con leche y canela, una combinación estupenda.














No tomamos café, y bebimos. cerveza y agua, quedándose la cuenta en menos de 25€ por cabeza.

miércoles, 5 de agosto de 2015

A nave de Vidan. Santiago

Nave industrial reconvertida en restaurante, con bar de entrada, mesas altas para tapeo y enorme sala.
No es el lugar apropiado para una cena romántica, la falta de decoración, las sillas incómodas y la sala tan abierta no lo hacen ideal, pero ofrece raciones abundantes a precios contenidos, aunque en esta primera visita nos ha dejado un sabor agridulce.
De primero compartimos una parrillada de verduras, bien resuelta pero sin ningún detalle que la destaque por encima de cualquier otra, hasta la presentación del plato resultaba insulsa.
De segundos tomamos el pulpo á grella, dos buenas patas, bien de punto y bueno de aliño y sazón, y el ollomol (besugo), que venía acompañado por patata cocida y ensalada (con demasiado vinagre de modena)
El besugo lo he tomado muchas veces mejor cocinado, incluso en casa me queda mejor resuelto. No quería organizar un espectáculo en el local y lo tomé, pero ni era del día ni estaba bien elaborado para cobrar 18€ por medio besiguito.
Los niños compartieron unas tostas de jamón, setas y queso, sabrosas y abundantes, y unos huevos rotos con jamon y chorizo, que les encantaron.
De postre unos canutillos de membrillo rellenos de crema de queso, muy buen postre, la crema muy rica, nada dulce, buen contraste.

También un coulant con helado de straciatella, un clásico, pero 6€ me parece demasiado para ese postre.
Al final pagamos 80€, un poco subido de precio, aunque las raciones sean abundantes.



sábado, 1 de agosto de 2015

O recreo da costa da morte, Cee

Pequeño restaurante de Cee, especializado en pescados pero que también ofrece carnes de cerdo y chuleton de ternera. Situado al lado del colegio de Cee, ofrece especialidades en pescados y mariscos del dia.
De primero tomamos unaa navajas (longueiróns) en salsa de cítricos y unas zamburiñas. Muy buenas las navajas, no tenían nada de arena, y muy ricas y en su punto de cocción las zamburiñas, que muchas veces las encuentras cocidas en exceso.


De segundos un codillo al horno para los dos peques, con buena patata frita.
Rape con salsa americana, ración abundante, servido con patata cocida y verduritas.
Merluza á galega, servida con guisantes y huevo cocido. Para mi gusto un poquito pasad de cocción, pero muy buen producto.
Atún a la plancha con calabacín y ensalada, con un punto de salsa de soja y almendras, buena combinación y ración muy abundante.
Después de esta abundancia no llegamos a los postres, dos helados para los peques y cafés para los adultos.
De precio sale por unos 35-40€ por persona.