sábado, 26 de julio de 2014

Yayo Daporta 2014. Menú degustación con Groupon

Visita anual al restaurante de Cambados, esta vez con un vale de Groupon para probar un menú de degustación en este restaurante con estrella michelin. Si teníamos alguna duda de que el menú fuese de menor calidad al que tomamos otros años por reservar con un Groupon, esta duda desaparece al comenzar con el cóctel de albariño en dos texturas, delicioso como siempre, un aperitivo sorprendente y perfecto comienzo para la degustación.
Sirven pan con aceite arbequina muy aromático. Quizás el fallo esté en el pan, ya que los hay mucho mejores por la zona, y éste n tiene nada especial.
Para comenzar nos trajeron de aperitivo la empanada abierta con xouba (sardinilla) en conserva y la miniterriba de foie con calabaza caramelizada. Me encanta la combinación del foie con el toque dulzón de la calabaza asada y caramelizada al soplete. Y la forma que le dan a la empanada para poder agarrarla con dos dedos es genial.

Después la breva rellena de bonito, con huevas de trucha y aceite de albahaca, servida con una crema de puerros. Muy fiba la crema, y una explosión de sabor la mezcla de la breva con el bonito. Es un plato que ya habíamos probado y me encanta.
Como siguiente entrante, o primer plato, huevo, patata y chorizo. Con este siempre se acierta, y más de la tierra imposible. 

Después los pescados, primero un xurelo  con judías verdes, huevas y toque de wassaby. Esto es tratar bien un pescado y poner un xurelo en valor.
Como segundo pescado una merluza rebozada perfectamente en su punto, acompañada de un puré ligero de sus huevas.
Finalmente los postres: infusión de frutos rojos y crema de queso con espuma de membrillo y reducción de licor cafe. Este segundo postre me pareció estupendo, sorprendente la reducción de licor café lo bien que combina con la crema y la espuma.
Para finalizar un café solo e infusión de menta-poleo.
En lo único que notamos el ir con un groupon fue en el acompañamiento del café, que normalmente viene con una cucharita de crema catalana y una trufa de chocolate, y en este caso no nos sirvieron.

sábado, 19 de julio de 2014

Restaurante la industrial, Santiago


Situado en la calle de Rosalía de Castro, número 24. En ese mismo hace unos años estaba ubicado el restaurante de Toñi Vicente, pero no esperéis encontrar parecido entre ellos. Decoración interesante, simulando una nave industrial, muy buena música ambiental y una buena selección de vinos por copa.
En la carta nos encontramos con una serie de platos para compartir, con influencias diversas, pasando por el ceviche, el won ton, ensaladas, carpaccio... Pero las especialidades del lugar son las hamburguesas y perritos. 
En nuestra visita tomamos los saquitos de vieira, a los que les faltaba un puntito de sal, y que venían sobre un caldo ligeramente insulso, que no le aportaba nada a los saquitos. También para compartir el ceviche de langostinos, que no resultaba un ceviche propiamente, ya que los langostinos estaban previamente escaldados y le faltaba fuerza, necesitaría algo más de cítrico. Además, eso de añadirle aceitunas rellenas de pimiento... como que no le va demasiado.
De segundos el perrito con nueces y queso, y la hamburguesa de secreto. Estos fueron, con diferencia, los platos que tenían ese punto de personalidad. Venían acompañados con patatas chips y una salsa agridulce con toque picante que le daba carácter al perrito.
Lo acompañamos con dos copas de vino, una cerveza y un agua. De postre escogimos uno para compartir, similar a una aprestrudel de manzana (crumble de manzana) acompañado de helado de frambuesa, que fue un buen colofón para la cena.
Pagamos 52€, lo cual no está mal, pero que podría ser un poco más ajustado, ya que el precio de la hamburguesa (12,50€) o del perrito (8,50€) es ligeramente elevado.
En conclusión, un sitio interesante para tomar algo con amigos, para tapear y tomar un vino y comenzar la noche.




sábado, 5 de julio de 2014

Restaurante Venezuela. San Pedro del Pinatar.

A orillas del Mar Menor, en el pueblo más al norte de la provincia de Murcia, tenemos un restaurante de corte clásico que trabaja con muy buen producto.
Ofrece mariscos gallegos y de la zona, así como pescados del mediterráneo y arroces.
En la terraza disfrutamos de comida para cuatro (2 adultos y dos niños) escogiendo de primero una ensalada de cogollos y ventresca y los calamares a la romana. Buena ventresca de Ribeira (Frinsa) y estupendos los calamares, además de abundantes.
De segundo tomamos el caldero, que presentan con el arroz en el caldero y el pescado aparte. El arroz muy sabroso, caldoso pero el grano entero. 
Imposible llegar al postre después de tanta abundancia, el café correcto.
Lo acompañamos por tres cervezas y una botella de agua y pagué 90€.
Creo que repetiré.